Sinopsis:
Imagina que corren los años 40, vives en Austria y eres un prestigioso psiquiatra de origen judío. Un día unos militares llaman a tu casa y te llevan en tren a un lugar desconocido. Te quitan tus posesiones, te desnudan, te afeitan la cabeza, y matan a tus seres queridos. Crees haberlo perdido todo. Todo. ¿Dame una razón para seguir viviendo?.
Viktor Frankl la encontró. Tras pasar 4 años en distintos campos de concentración sufre una catarsis interior que originó una nueva terapia basada en el sentido de la vida: la Logoterapia.
“El hombre en busca de sentido” tiene dos secciones. La primera está dividida en tres fases: el internamiento, la vida en el campo, y la liberación. En la segunda comenta conceptos básicos de la Logoterapia.
Opinión:
Este libro publicado por primera vez en 1946 (aunque con otro nombre) fue un punto de inflexión en el análisis existencial del ser humano y en la psicoterapia.
Me parece una obra maestra llena de enseñanzas, que invita a releerla. Proporciona una visión profunda y realista del hombre desde el sufrimiento y el amor.
Lo que más me gusta es que el autor lejos de rendirse, extrajo lo bueno de esta experiencia y lo recopiló en unos pedazos de papel que se transformaron en esta joya. Se dio cuenta de la capacidad del hombre para superar la adversidad. Miró a los ojos al sufrimiento, y como no podía erradicarlo lo usó para crecer interiormente. Le arrebataron la libertad física, pero no la libertad de pensamiento. Eligió a través de la actitud.
Llegó a la conclusión de que la salvación del hombre está en el amor a un ser querido o a una tarea, porque son los pilares que construyen la esperanza y dan sentido a la vida. “Quien tiene un porqué para vivir, encontrará casi siempre el cómo”. Mientras estaba encerrado soñaba con escribir este libro. El libro le ayudó a aferrarse con fuerza a la vida.
Se la recomiendo a toda aquella persona que no valore la importancia de su existencia para él y para otros. Todos tenemos una misión en la vida. Hay que descubrirla y cumplirla.
Virginia Rodríguez