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• Las acciones se dirigen a grupos con necesidades especiales o en riesgo de exclusión social, entre otros

El 3 de diciembre se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, cita proclamada por primera vez en 1992 por la Asamblea General de las Naciones Unidas. La fecha promueve la reflexión sobre cuestiones de discapacidad y llama la atención sobre los beneficios de una sociedad inclusiva y accesible para todos. La Casa-Museo Pérez Galdós, centro museístico gestionado por la la Consejería de Cultura del Cabildo de Gran Canaria en la capital grancanaria, se une a la movilización promoviendo las visitas denominadas ‘Un museo para tod@s’.

Se trata de recorridos adaptados a diferentes tipos de colectivos de diversidad funcional psíquica e intelectual, salud mental, diversidad funcional física y orgánica y/o población en riesgo de exclusión social. La intención es acercar los contenidos de la Casa-Museo de una forma lúdica, creativa y adaptada. Por ello, las visitas, que están a cargo del departamento de Educación y Acción Cultural del Museo, se amoldan a las necesidades específicas de cada grupo: edad, movilidad, nivel de comprensión y comunicación, entre otros aspectos.

El objetivo final es que la experiencia de la visita al museo se convierta en un vehículo integrador, por sus características terapéuticas y por ser una herramienta pedagógica y de intervención social. La directiva de la institución confía plenamente en esta propuesta para conseguir uno de los objetivos prioritarios del centro, el de hacer un museo más social e inclusivo.

La directora de la Casa-Museo Pérez Galdós, Victoria Galván, inició el proyecto de museo inclusivo ‘Galdós cuenta contigo’ en 2018 y tiene claro el camino a seguir. “Nos propusimos hace algunos años profundizar más en la inclusión de todos y todas en el museo, es decir, queríamos hacer algo que fuese más allá de ofrecer un servicio cultural”. Galván aclara también que el proyecto “tenía que poner a nuestros visitantes, no solo en el plano de la recepción del conocimiento cultural y el disfrute del mismo, sino como parte activa y participativa dentro del museo. Más o menos la idea no era tanto que nosotros nos adaptáramos a sus necesidades para integrarlos, sino que fuesen estos colectivos los que nos adaptaran a nosotros y nos integraran en sus planes culturales y sociales”, puntualiza la responsable de la sede galdosiana.

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